Los síntomas de una embolia pulmonar sólo se presenta el 50% de los casos, para el resto es completamente asintomática y sólo se detecta cuando la falta de oxígeno afecta a los demás órganos.
Aquellas personas que presentan síntomas ante una embolia pulmonar podrán detectar:
- Falta de aire
- Tos con expectoración de sangre
- Dolor torácico
De forma previa, y también produciéndose sólo en ciertos casos, es posible sentir:
- Inflamación
- Calor
- Dolor
Todos estos en ciertas partes del cuerpo, sobre todo en una de las piernas. Éstos síntomas corresponden a los de la formación de un coágulo en la sangre.
Cómo actuar ante los síntomas de una embolia pulmonar
Es necesario actuar con suma urgencia ante los síntomas de una embolia pulmonar. Para esto diríjase a un centro de atención primaria o a un profesional médico, dependiendo de donde pueda obtener ayuda lo antes posible.
El diagnóstico se lleva a cabo realizando diferentes tipos de pruebas. Lo primero a inspeccionar son los síntomas indicados por el paciente. Mediante la realización de análisis clínicos es posible detectar la formación de un coágulo en la sangre, y de los efectos que este produce.
Estudios adicionales incluyen una radiografía, un electrocardiograma y un ecocardiograma. Los mismos permiten determinar el estado del corazón y descartar otras afecciones con síntomas comunes, tales como un infarto de miocardio.
Los tratamientos a seguir dependerá del estado actual del paciente y de la gravedad del caso. Todos los esfuerzos irán abocados a estabilizar el coágulo, evitar que este siga creciendo e intentar eliminarlo.
Causas de una embolia pulmonar
La embolia pulmonar se origina generalmente cuando un coágulo ubicado en la pierna llega hasta el pulmón viajando a través de la sangre. Aquellas personas que padecen de una embolia pulmonar tiene la posibilidad de ver el funcionamiento del pulmón seriamente afectado.
Los niveles bajos de oxígeno en la sangre pueden provocar otros tipos de lesiones en los órganos de todo el cuerpo.